Blog institucional

En este momento de la historia de la humanidad parece que todo pasa por la web. Y en lo que se refiere a negocios es cierto. Las comunicaciones se han convertido en acciones distantes, dejando de lado poco a poco el cara a cara. Comenzó con el uso del teléfono y desde ahí la tecnología nos llevó en muy poco tiempo a la red de redes. Más allá de lo que psicólogos y sociólogos puedan objetar, lo cierto es que las nuevas tecnologías están entre nosotros y tenemos que aprender a sacarles el mayor partido a favor de nuestros objetivos personales, profesionales o empresariales.

Llegar a la web no es tan difícil desde que está en marcha la denominada web 2.0: una nueva etapa más amigable y sencilla de utilizar para el ciudadano común. Y dentro de esta Web 2.0, la estrella son los blogs. Páginas personales o institucionales autogestionadas que permiten transmitir lo que pienso y quiero dar a conocer.

Creados como una forma de expresión personal, con la apertura a comentarios de los lectores, han invadido todos los ámbitos de la actividad humana, entre los cuales no podían faltar las empresas: este fenómeno comprenden por igual a grandes corporaciones y a pequeños emprendimientos.

Los blogs son utilizados por las empresas para diversos fines: medir la opinión; recabar o transmitir información sobre el sector o la competencia; como herramientas de comunicación interna o de coordinación de grupos de trabajo.

Es indispensable integrar el blog en una estrategia de comunicación más amplia, para crear marca y fidelizar clientes, no sólo como herramienta de venta. Los especialistas en nuevas tecnologías destacan que es necesario saber qué es lo que quiero y necesito, saber para qué sirve un blog y ser conscientes de lo que puedo sacar de él. Este consejo debe ser aplicado no sólo a los blogs, sino a todas las herramientas de comunicación que se utilicen en la empresa.

Herramientas de comunicación

Cuando hablamos por primera vez con un cliente, los comunicadores solemos referirnos a la importancia de las herramientas de comunicación, cuáles son las ventajas para una organización y la necesidad de que estas sean desarrolladas en una relación coherente con la política de la empresa.

Pero…¿qué son las herramientas de comunicación? ¿De qué hablamos cuándo hacemos referencia a una herramienta de comunicación?

Si bien cada profesión tiene sus propias herramientas de trabajo, las herramientas de comunicación no se refieren a las que usamos los comunicadores sino a los elementos que diseñamos y producimos para una organización en particular.

Las Herramientas de Comunicación, así con mayúsculas, son todos aquellos elementos que utiliza una organización para comunicarse con sus públicos, con aquellas personas, grupos u otras organizaciones que están o pueden estar interesadas en nuestros productos, servicios o gestión.

¿Son las Herramientas de Comunicación iguales para todos? No. Hay diferencias entre los canales que utilizamos para cada uno de los grupos destinatarios. No es lo mismo comunicarse con un empleado, que con un accionista. Con un medio de comunicación, que con un organismo estatal. Con un cliente, que con un proveedor.

Cada herramienta es definida, diseñada y producida en función del mensaje a transmitir y del destinatario. También se tiene en cuenta la organización que desea transmitir el mensaje, su estilo de gestión de las comunicaciones y la imagen que transmite o quiere transmitir de sí misma.

A las clásicas Herramientas de Comunicación, hoy se le suman todas las proporcionadas por la web 2.0. Los blogs y las redes sociales nos permiten llegar cada día a los distintos públicos, en forma inmediata y recibir de ellos el feedback necesario para saber si estamos, o no, en el buen camino comunicacional.

¿POR QUÉ COMUNICAR?

Cada producto o servicio es brindado por una multiplicidad creciente de proveedores. Que el posible cliente nos elija por sobre nuestra competencia estará determinado en primer lugar por la calidad de nuestro trabajo.


En segundo lugar, pero no por eso menos importante, es necesario que sepan de nuestra existencia. Para que esto sea posible, debemos darnos a conocer, debemos estar en la mente del cliente antes de que surja la necesidad, ser el primero que recuerde o del que consiga información a la hora de buscar un proveedor.


La gama de herramientas de comunicación con las que contamos en este siglo XXI es amplísima. Sólo tenemos que encontrar la más apta para comunicarnos con el mundo. Con nuestro mundo.

COMUNICÁNDONOS

Aunque suene a frase hecha, vivimos en un mundo hiperconectado y saturado de información.

En todo momento y a través de todos los canales de comunicación que se nos puedan ocurrir, nos están diciendo qué hacer, qué comprar, dónde ir.

Como empresa, nuestro nombre está en boca de todos. Páginas web, blogs, diarios on-line, radios personales, periódicos y revistas masivos o barriales. Qué diga cada uno de ellos acerca de nosotros, depende de las acciones de comunicación que nuestra empresa realice.

Y es importante recordar que no transmitir información, también es comunicar.

Bienvenidos al maravilloso mundo de la comunicación.